DISFUNCIONES CRANEOMANDIBULARES Y PATOLOGÍA DE LA ARTICULACIÓN TEMPOROMANDIBULAR (ATM)
Los trastornos de la articulación temporomandibular (ATM) incluyen problemas relacionados con la propia articulación y los músculos que intervienen en ella, con el raquis cervical y la postura en general. Diversas etiologías pueden provocar alteraciones en este sistema, como de tipo biomecánico, inflamatorio, sistémico, psicológico, etc. Por lo que la presentación clínica de estos trastornos es bastante variada. Ahí reside la dificultad a la hora de establecer un diagnóstico y posterior tratamiento que, junto con la labor del odontólogo, da buenos resultados.
¿ Qué es ATM?
La ATM es una articulación con un menisco intraarticular. Y esta sometida a la influencia de dos grupos musculares. Uno de ellos, los músculos masticadores, los que cierran la boca, pueden ejercer fuerzas de presión de más de 500kg/cm2. El otro grupo menos potente son los supra e infrahioideos, que abren la boca, participando en la deglución. Estos grupos musculares son susceptibles de espasmarse, de provocar dolores referidos, aumento de las fuerzas de presión y desordenes mecánicos intraarticulares.
Distinguimos tres tipos de movimientos: apertura/cierre, lateralidad o diducción y propulsión/retropulsión.
La relación de perfecto engranaje de los dientes determina la posición centrada de la ATM. Una mala oclusión dental es generadora de espasmos musculares y trastornos mecánicos que nos llevarán a vivir con dolor. Por eso, es importante tener una oclusión equilibrada.
Una mala oclusión dental será responsable de una trayectoria de evitamiento durante el cierre de la boca y de unas presiones articulares elevadas. La posición de los dientes está sometida a las fuerzas de empujes linguales, por un lado, y a los músculos de la boca, como orbiculares de los labios, etc., por otro.
Los músculos masticadores tienen como vocación posicionar muy finamente la mandíbula en el espacio. Los espasmos van a perturbar la biomecánica intraarticular y acabarán siendo fuente de dolor.
El equilibrio de la ATM posee una función preponderante sobre el equilibrio del raquis cervical. Los músculos cervicales forman parte íntegra del sistema. Existe una relación de reciprocidad tónica entre el haz anterior del músculo temporal y el trapecio superior: los dos son músculos antigravedad y se espasman en sinergia.
En un gran número de casos, el tratamiento del sistema masticador se considera uno de los puntos más importantes para el raquis cervical.
La afectación de este sistema puede darnos clínica como: dolores de oído y ATM, laterodesviaciones de la mandíbula durante la abertura de la boca, bloqueos mandibulares, disminución de la abertura, chasquidos meniscales, zumbidos en el oído y vértigos, cefaleas, cervicalgias, etc.
El aparato masticador une las cadenas miofasciales anteriores y posteriores, por lo que influye claramente en la postura del paciente.
Su diagnóstico debe iniciarse por la exploración del raquis cervical y un estudio de la movilidad de los movimientos de la boca, analizando la presencia o no de chasquidos, palpación de la musculatura implicada y los cóndilos mandibulares, movilidad analítica de la ATM, examen de la oclusión dental y exploración osteopática craneal y raquídea.
Por ello, el abordaje osteopático sobre esta región se convierte en casi imprescindible en nuestras consultas, bien por un problema específico en esta región, bien por afectación de este sistema en muchas otras entidades patológicas.
